El almacenamiento de energía es necesario en el día a día de la sociedad actual, para igualar la producción y la demanda de energías renovables, alimentar una gran variedad de dispositivos electrónicos y permitir el desarrollo de tecnologías emergentes. A medida que los vehículos eléctricos y las energías renovables penetren en el mercado, habrá un incremento en la demanda de baterías. De hecho, si se cumplen las proyecciones en el mercado de baterías de ion de litio, la capacidad global de fabricación de baterías alcanzaría los 1700 GWh por año en 2028, alcanzando una producción de 7 millones de toneladas de baterías al año. A pesar de que las baterías de ion litio son una solución eficiente, hay muchos aspectos de estas que deben mejorarse, como el rendimiento de la batería o el proceso de reciclaje. Por esta razón se deben buscar alternativas innovadoras como por ejemplo baterías de flujo redox, metal-aire, basadas en moléculas orgánicas, etc. para desarrollar una nueva generación de baterías que tengan mejoras en ciertos indicadores clave de rendimiento.
En este contexto, esta unidad de investigación conjunta BATTERY2030 tiene como objetivo reunir conocimientos complementarias para proporcionar soluciones holísticas a los principales desafíos a los que se enfrenta el desarrollo de baterías avanzadas, teniendo en cuenta el objetivo establecido por la Comisión Europea en el European Green Deal, UN Sustainable Development Goals, así como el Plan de Acción Europeo Batteries and the European SET-plan.